Bruselas, 12 may (EFE).- La Comisión Europea (CE) revisó este miércoles al alza sus previsiones de crecimiento del PIB español, hasta el 5,9 % en 2021 y al 6,8 % en 2022, gracias a la recuperación de la actividad económica por la retirada de las restricciones y el avance de la vacunación, y al impacto "decisivo" de los fondos europeos.
Tras caer un 10,8 % en 2020, España será la economía de la Unión Europea (UE) que más crecerá este año y el próximo y recuperará el nivel previo a la pandemia a finales de 2022.
La tasa de paro, sin embargo, aumentará dos décimas este año, hasta el 15,7 %, y solo bajará en 2022, al 14,4 %, según las previsiones publicadas hoy.
MAYOR CRECIMIENTO
Bruselas mejoró en tres décimas su previsión para 2021 y en un punto y medio la de 2022 con respecto a las de febrero pasado, que no tuvieron en cuenta el efecto de los fondos europeos. Sin embargo, sus proyecciones son más pesimistas que las del Gobierno español, que espera un incremento del PIB del 6,5 % este año y del 7 % el próximo.
La Comisión prevé que el PIB rebote en el segundo trimestre y tome brío en la segunda mitad de 2021 gracias al aumento del consumo privado y la inversión a cuenta del ahorro acumulado durante la pandemia, a lo que en 2022 se sumará el repunte de la demanda externa conforme se recupere el turismo.
"La implementación del Plan de Recuperación y Resiliencia jugará un papel decisivo en el rebote en 2021 y ayudará a sostener la expansión económica en el horizonte de las previsiones", afirma el Ejecutivo comunitario, que espera el mayor impacto de los fondos europeos en 2022.
Bruselas calcula que la mitad de los casi 70.000 millones de euros en transferencias directas que corresponden a España -y se espera empiecen a llegar en julio- se absorberán hasta finales de 2022, en concreto 12.000 millones de euros este año y 22.000 millones de euros el próximo, según explicó el comisario de Economía, Paolo Gentiloni.
"Llevará algo de tiempo hasta que los proyectos lleguen a una fase en la que se acometa efectivamente el gasto, así que es posible que el impacto sobre la actividad económica del plan sea más fuerte en 2022", explicó el comisario, quien no quiso valorar el plan enviado por el Gobierno a Bruselas el 30 de abril.
Gentiloni atribuyó a este cálculo la diferencia entre las previsiones de la Comisión y las del Gobierno y subrayó que las proyecciones para España son "muy positivas".
La Comisión advierte, en todo caso, que sobre la economía española siguen pesando "incertidumbres" ligadas sobre todo a la recuperación del turismo, al efecto de la retirada de las medidas de apoyo por la pandemia y a la implementación efectiva del plan de recuperación.
En este sentido, Gentiloni instó a evitar una retirada "abrupta" o "prematura" de las ayudas.
EL PARO SUBIRÁ EN 2021
El Ejecutivo comunitario anticipa, por otro lado, que el desempleo aumentará del 15,5 % actual hasta el 15,7 % en 2021, la segunda tasa más alta de la UE después de Grecia, y que solo bajará en 2022 (14,4 %), mientras que el Gobierno espera una reducción de tres décimas ya este año.
Bruselas apunta que medidas como los ERTE han mitigado el golpe del covid-19 y que se ha apoyado la liquidez de las empresas con avales y moratorias de pago, pero advierte de la posibilidad de que aumenten las quiebras empresariales, con el consecuente riesgo para el empleo y la capacidad productiva.
DÉFICIT Y DEUDA BAJAN
Por el lado fiscal, la Comisión proyecta que el déficit público baje del 11 % en 2020 al 7,6 % en 2021 y al 5,2 % en 2022 gracias a la recuperación de la actividad económica y al menor impacto de las medidas por covid-19, una cota similar a la media comunitaria este año (7,5 %), pero superior a ella el próximo (3,7 %).
La deuda pública, que en 2020 se disparó en 25 puntos hasta el 120 % del PIB, se reducirá ligeramente este año, al 119,6 %, y en mayor medida el próximo, al 116,9 %.
Se trata en ambos ejercicios del tercer mayor ratio de deuda en la UE, por detrás de Grecia, Italia y Portugal, y muy superior a la media comunitaria (94,4 % y 92,9 %, respectivamente).
Bruselas advierte de que, si bien los avales públicos adoptados por la pandemia "proporcionan un apoyo crucial, también constituyen un riesgo para la perspectiva fiscal".
En general, la Comisión dibujó hoy una fotografía de la economía europea algo más optimista que la de febrero pasado gracias al impacto del fondo de recuperación, que le ha permitido elevar el crecimiento previsto en la UE (4,2 % este año y 4,4 % el próximo) y en la eurozona (4,3 % y 4,4 %, respectivamente).