El debate entre el senador JD Vance y el exgobernador Tim Walz en Ohio se centró en temas clave como la economía, la migración y la atención médica. Ambos candidatos expusieron sus diferencias políticas, con Vance criticando la gestión de Walz y destacando su compromiso con los intereses de los ciudadanos. La discusión también abordó la necesidad de mejorar la calidad de vida de los habitantes de Ohio a través de políticas efectivas que fomenten el desarrollo económico y el bienestar social, enfatizando
El tono del debate fue cordial, aunque se notaron las divergencias ideológicas. Vance cuestionó las políticas económicas de Walz, acusándolo de perjudicar a la clase trabajadora mediante la implementación de impuestos altos y regulaciones. En el ámbito de la migración, Vance criticó a la vicepresidenta Kamala Harris y se refirió a la situación en Springfield, Ohio, argumentando que la falta de una política migratoria clara había generado problemas en la comunidad, como el aumento de delitos y la presión sobre los servicios publicos. Walz, por su parte, defendió la legalidad de los procesos migratorios, subrayando la importancia de un enfoque humano que proteja a las familias y resaltando que los inmigrantes.
A medida que el debate avanzaba, ambos candidatos presentaron sus propuestas sobre atención médica y acceso a la educación. Los moderadores formularon preguntas que reflejaban las inquietudes de los locales electorales, asegurando que la discusión se mantuviera centrada en los temas que más afectan a la población de Ohio. Este intercambio de ideas permitió a los ciudadanos conocer las posiciones de Vance y Walz en temas críticos para el futuro del estado, dejando claro que la elección se decidirá en función de las prioridades y preocupaciones de los candidatos en los próximos meses, mientras cada candidato trata. de consolidar su base de apoyo en una carrera eléctrica.