¿Quiénes recuerdan la época dorada del reggaetón? A principios del milenio, Daddy Yankee con “La Gasolina”, Calle 13 con “Atrévete-te” y Tego Calderón con el “Abayarde” popularizaron el género urbano caribeño a nivel global. En ese entonces, ellos causaron controversia debido a su contenido que algunos sectores consideraron explícitos y vulgares.
Pero ahora, una nueva vertiente musical emerge en las calles de Puerto Rico, se le conoce como “maleanteo” y –en comparación– hace que esos temas de antaño parezcan canciones infantiles.
El maleanteo surge en reacción al reggaetón, un género actualmente dominado por la industria de la música, cuyo enfoque va centrado en producir éxitos internacionales (tanto en radio como en plataformas digitales) pero que en el proceso pierde el esencial elemento urbano, ese sentimiento callejero, de barrio.
En lo que al ritmo se refiere, esta modalidad utiliza pistas de trap, son lentas y en lugar de chanteo, el rapeo emula un tipo de balbuceo. Aunque conlleva un entorno calmado, sus líricas son de violencia extrema e intrínsecamente vinculadas al bajo mundo.
Característica principal
Uno de los aspectos más preocupantes es la característica principal del maleanteo, sus exponentes no pueden ser solo intérpretes. Para ser respetado y aceptado por correligionarios, críticos y fanáticos, es necesario “vivirse la película”, conocer de primera mano lo que hablan en sus canciones.
Daddy Yankee, por ejemplo, viene de un vecindario humilde y en muchos de sus temas hablaba de situaciones que allí sucedían, no obstante, el artista se enorgullece en admitir que nunca ha usado drogas o sido sicario. En contraste, dentro de los parámetros que establece la nueva generación, esta dinámica es una “farsa”.
Matar, eliminar rivales, la venganza, el consumo de estupefacientes y hacer dinero mediante la venta de narcóticos son siempre la temática. Yovng Chimi, Hanzel la H, Hades 66, Luar la L y ANKHAL son algunos de los más sonados y todos abiertamente vinculados a organizaciones criminales en la Isla del Encanto como Los Diablos de Llorens.
En muchas de las canciones se narran eventos de guerra entre pandillas en los que se llevan a cabo ejecuciones. Inclusive, existen rumores sobre un tema de Chimi que describe el asesinato de Pacho el Antifeka, un exponente del género quien –en un ajuste de cuentas– hace unos meses fue abatido a tiros en el estacionamiento de un concurrido centro comercial en la ciudad de San Juan.
Pugna con Karol G
En muchas canciones de maleanteo se hace referencia a los llamados “bichotes”. La palabra es un anglicismo proveniente del concepto “big shot”, que en el argot coloquial estadounidense significa persona importante. En Puerto Rico un “bichote” es un líder de grandes proporciones en el negocio del narcotráfico.
Por alguna razón, la cantante colombiana, Karol G, decidió apropiarse del término en su modalidad femenina, “bichota”, y modificó su significado haciéndolo sinónimo de “mujer empoderada”.
La acción de la colombiana no ha sido bien acogida por “bichotas” puertorriqueñas, especialmente aquellas cantantes de maleanteo que lo han manifestado por medio de sus canciones como La Yori, Naiee y Paopao. De hecho, hasta Bad Bunny mencionó la polémica en el tema “Vuelve Candy B”, de su último álbum.
Hasta hace unos meses, el maleanteo parecía ser un movimiento “underground”, sin embargo, artistas ya establecidos –como el antes mencionado Benito Martínez y Anuel AA– reconociendo el talento han realizado colaboraciones con estos jóvenes, popularizando “lo malo” para entonces, convertirlo en moda.
*Luar la L es otro joven intérprete de maleanteo. Tras pasar un tiempo en prisión por cargos relacionados a la ley de armas en Puerto Rico, la L ha grabado exitosas colaboraciones con el conejo malo y Anuel AA. (Facebook/Luar la L)