Estados Unidos sufre una crisis migratoria sin precedentes.
El plan del presidente Trump de implementar mano dura a la inmigración, se cumplió al pie de la letra y sobrepasó las promesas de campaña.
El 30 de octubre de 2020, el Congreso publicó la “primera narrativa completa” sobre la política de “cero tolerancia” de la administración Trump.
La misma –cual se dice que será la marca de identidad del legado migratorio del presidente Trump– condujo a la separación forzada de miles de niños de sus padres en la frontera entre Estados Unidos y México en el 2018.
El informe del Comité Judicial de la Cámara de Representantes ofrece una mirada en profundidad a una política marcada por el caos, la incompetencia y la crueldad.
Los documentos obtenidos por el comité tras una investigación de casi dos años, cuentan una historia de desorden en torno a la planificación e institución de una política inhumana.
Es así como el informe confirma lo que muchos ya sabían: que el gobierno no tenía ningún plan para garantizar que las familias pudieran ser reunificadas antes de su deportación.
Niños en el limbo
Los abogados que trabajan para reunir a las familias migrantes separadas por la administración Trump, antes y durante su política de “cero tolerancia” en la frontera, creen que el número de niños separados para los que no han podido encontrar a sus padres, es 666, una cifra mayor a los 545 que se había estipulado anteriormente, según un informe de NBC News.
Casi el 20% (129) de esos niños eran menores de cinco años en el momento de la separación, de acuerdo a la citada fuente.
Promesa electoral
El presidente electo Joe Biden se ha comprometido a establecer un grupo gubernamental que trabajaría para reunir a todas las familias migrantes separadas por las políticas de la administración Trump, comenzando desde el día “uno” de su mandato.
Además, promete terminar con el mecanismo ineficiente e inhumano de procesar migrantes que buscan asilo en la frontera.
Biden dirigirá los recursos necesarios para garantizar que las solicitudes de asilo se procesen de manera justa, eficiente y que trate a las familias y los niños con compasión y sensibilidad, según se describe en el sitio de la campaña del presidente electo.
Presión de activistas
Organizaciones pro-inmigrantes como Mamás con Poder, la cual está conformada por miles de integrantes a través de todo el país, aboga por un sistema inmigratorio justo para todas las personas indocumentadas viviendo en Estados Unidos y aquellos que llegan buscando asilo y refugio.
En una declaración, solicitan “poner fin a la separación de las familias y proteger a los niños”.
A su vez exigen que se proporcionen “protecciones claras para los derechos básicos, la seguridad y el bienestar de los niños, y que estas incluyan los servicios de abogados financiados por el gobierno y la asistencia de defensores de los niños en los procedimientos de inmigración”.
También exigen que inmediatamente se ponga fin a las “prácticas nocivas de la detención familiar, proteger los derechos de los padres, garantizar el debido proceso y aumentar las alternativas a la detención”.
Si quiere enviar un mensaje al Congreso sobre este asunto, puede firmar esta petición de Mamás con Poder a través del enlace: https://rb.gy/19bjma.