Lisboa, 26 ago (EFE).- La Feria del Libro de Lisboa abre hoy una edición llamada a recuperar el ritmo prepandemia, con un despliegue de años anteriores al virus y el regreso de los escritores internacionales, como el cubano Leonardo Padura o la española María Dueñas.
Este año la cita no solo vuelve, sino que lo hace con un despliegue mayúsculo, el segundo más grande de sus 91 ediciones, apenas superado -y solo por tres casetas más- en 2019, y un aforo ampliado a 5.500 personas en simultáneo en 10.000 metros cuadrados.
"Es de hecho volver en grande", explica a Efe Pedro Sobral, vicepresidente de la Asociación Portuguesa de Editores y Libreros, que organiza un evento que hasta el próximo 12 de septiembre tiene como "gran objetivo" no solo superar 2020, sino "sobre todo conseguir datos incluso mejores que 2019".
El optimismo es rampante en el Parque Eduardo VII de Lisboa, que vuelve a acoger la Feria del Libro, y donde se repiten medidas de seguridad como mascarilla, distancia y gel hidroalcohólico a la entrada de algunas casetas, donde el miedo se ha reducido y se siguen ojeando los títulos de Jane Austen, Stephen King o Fernando Pessoa con placer.
"En un espacio como este nunca me sentí en peligro", cuenta a Efe Rosa Valente, que acude a la feria desde hace 53 años, "tenemos que tener cuidado cuando pensamos en manosear un libro, tenemos que tener cuidado en desinfectar las manos", reflexiona, pero lo demás es igual a la prepandemia.
EUFORIA CON LA VACUNACIÓN
Familias con niños, jóvenes, veteranos de los libros, últimos retoques para los espacios donde habrá charlas. El tránsito por las dos calles en las que se emplazan las casetas es constante en el primer día de feria, que para Luis Vitoriano se zanja con la compra de hasta tres libros.
"No vine el año pasado, y este tenía algún recelo, pero como el espacio es abierto...", explica a Efe este veinteañero bajo su mascarilla de Star Wars. Le parece que este año "es más seguro venir".
"Ya tengo las dos dosis", agrega. La vacunación es la gran explicación para el optimismo de libreros y lectores, extendido a las autoridades del país cuando se cuenta ya al 72 % de la población portuguesa inmunizada ante el coronavirus.
"Vemos que las personas traen nuevamente niños, ya están mas relajados", apunta por su parte Joana Freitas, responsable de comunicación del sello 20|20 Editora.
"Esperamos alcanzar los números de 2019 y conseguir una mayor normalidad, creemos que las personas van a volver a la feria con una mayor seguridad y siendo cumplidas todas las normas", sostiene, apuntando como la gran baza para atraer a clientes el nuevo libro de la superventas Paula Hawkins.
Aunque este año, tan importante como leer las novedades será poder volver a ver a quienes las escribieron, que el año pasado no se desplazaron para no arriesgar en plena pandemia.
LEONARDO PADURA, MARÍA DUEÑAS, LAURENTINO GOMES
Y es que las estrellas literarias vuelven a Lisboa. El cubano Leonardo Padura, la española María Dueñas y el brasileño Laurentino Gomes, entre otros, regresan de la mano del sello Porto Editora, que no esconde su satisfacción.
"Aún no es lo mismo de los tiempos prepandemia, pero ya es algo más próximo", destaca a Efe Paulo Rebelo Gonçalves, portavoz del grupo Porto Editora, que también tiene este año "una agenda de eventos más diversificada y más fuerte" con la que se espera remontar la crisis del sector.
"El mercado portugués perdió en 2020 cerca de 17 % de su valor. Es absolutamente fundamental que este año la feria tenga un mayor peso", insiste Sobral.
Es un momento complicado, coinciden los especialistas. La feria, que tradicionalmente se celebra en junio, lleva dos ediciones atrasada al final del verano, un momento en que las familias piensan en los gastos de la vuelta al colegio, y los restantes adultos se preparan para el otoño.
También requiere un esfuerzo para los editores, que comienzan a preparar la campaña navideña. Las cosas mejorarán el próximo año, dice Sobral, pero el pistoletazo conviene darlo ya.
Por Cynthia de Benito
