PITTSBURGH, Pensilvania — En contraste con su fachada industrial, la ciudad de Pittsburgh se encuentra rodeada por densos bosques.
En uno de ellos, se encuentra una joya de la arquitectura, una maravillosa construcción que a pesar de su imponente tamaño y complejidad, se completa sin hacer daño al medio ambiente, de hecho, le llaman “Fallingwater”, porque una pequeña cascada de agua natural corre a través de la sala.
Fallingwater es una mansión que fue diseñada en 1935 por el reconocido arquitecto estadounidense Frank Lloyd Wright (1867-1959).
Fue construida para servir como residencia privada y casa de fin de semana para la familia del dueño de la conocida cadena de tiendas por departamentos de Pittsburgh, Edgar J. Kaufmann, Sr, las cuales más tarde fueron compradas por la corporación Macy’s.
Fallingwater es una de las obras más aclamadas de Wright y la que mejor ejemplifica su filosofía de la arquitectura orgánica: la unión armoniosa del arte y la naturaleza.
Se encuentra en las montañas del suroeste de Pensilvania, también conocidas como las Laurel Highlands, en Mill Run, Pensilvania, en el condado de Fayette, que está a unas 70 millas al este de Pittsburgh.
Wright diseñó Fallingwater para elevarse por encima de la cascada sobre la que está construida. Contando con una casa de huéspedes y un ala para personal de servicio, esta se completó en 1939 y se construyó con arenisca nativa de la zona y otros materiales extraídos de la propiedad.
La familia Kaufmann, Edgar J. Kaufmann, Sr. (1885-1955), Liliane S. Kaufmann (1889-1952) y su hijo, Edgar Kaufmann Jr. (1910-1989), poseían, vivían y usaban Fallingwater en diversas capacidades durante sus vidas.
Pero en 1963, Edgar Kaufmann Jr. donó y confió Fallingwater con sus 469 acres de naturaleza circundante, a la Western Pennsylvania Conservancy.
En la actualidad, Fallingwater abre al público como museo y está rodeado por 5,100 acres de bosque natural conocida como la Reserva Natural Bear Run.
Fue designado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, junto con otros siete edificios diseñados por Wright, el 10 de julio de 2019.
Además, Fallingwater es Monumento Histórico Nacional y Tesoro de la Commonwealth of Pennsylvania, nombrado el “mejor trabajo de todos los tiempos of American Architecture” en una encuesta de miembros del American Institute of Architects (Instituto Americano de Arquitectos).
Desde su inauguración hace más de 80 años, sobre cinco millones de visitantes han viajado y experimentado Fallingwater.
La revista Travel + Leisure declaró que es “uno de los 12 hitos que cambiarán la forma en que ves el mundo”.
Es la única obra importante de Wright que ha pasado a ser de dominio público con sus muebles y obras de arte originales intactos.
Es un estupendo destino de fin de semana para este otoño.
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