El año pasado, los Pittsburgh Pirates tuvieron su mejor temporada en media década. Finalizaron el año en el cuarto puesto en la National League Central Division (Liga Nacional, Sección Central).
Desafortunadamente, la ofensiva fue muy pobre terminando en el puesto número 22 de un total de 30 equipos en números de “runs” (carreras).
Aun cuando la mayoría de los expertos de béisbol vaticinan que los Piratas quedarán entre los últimos, sus fanáticos no pierden la esperanza de que, al menos, terminarán la temporada en el tercer puesto de la Sección Central.
Los equipos de esta división –como los Cincinnati Reds, Milwaukee Brewers, Chicago Cubs y St. Louis Cardinals– son buenos rivales.
Un factor para esta próxima temporada será el regreso a la actividad del dominicano Oniel Cruz, después de una lesión de su peroné izquierdo. Muchos esperan que su retorno, venga con más jonrones que ponches.
KeBryan Hayes y Jack Suwinski constituyen un dúo de poderosos bateadores. La estrella de los jardineros es Bryan Reynolds que recientemente firmó un contrato de casi 107 millones de dólares por ocho años.
La eficacia de los lanzadores será un factor importantísimo en el resultado final. Los Piratas se verían fortificados con la adquisición del lanzador Martin Pérez, ganador de la World Series (Serie Mundial) 2023 con los Texas Rangers. Mich Keller es una verdadera estrella y el mejor lanzador del equipo.
También se debe considerar a Paul Skenes (proveniente de Louisiana State University (LSU). El novato comenzará el año en las ligas menores.
Aunque el equipo de Pittsburgh pierde sus partidos, a muchos latinos de la región les encanta el béisbol, particularmente los dominicanos, cubanos y venezolanos.
El último campeonato que lograron fue hace muchos años, en 1979. También ganaron uno con el gran jugador de Puerto Rico, Roberto Clemente en 1972. El puente cerca del estadio lleva su nombre y es considerado una leyenda por la MLB.
Su otro título en tiempos modernos fue en 1960 cuando sorprendieron a los New York Yankees.
La ciudad de acero cuenta con uno de los mejores estadios de béisbol de todo el país.
PNC Park ofrece una vista panorámica espectacular de Pittsburgh con los puentes, edificios y los tres ríos. Así que, si no puede asistir al juego inaugural del 5 de abril contra los Orioles de Baltimore, recuerde que –en apoyo al equipo de casa– debe planificar una visita al estadio para disfrutar de cualquier partido en los próximos meses.