Edward Olivares, de los Piratas, vivió un momento de gloria el lunes por la noche al lograr su primer grand slam en la victoria contra los Angelinos de Los Ángeles. El impactante batazo rompió el empate sin anotaciones en la tercera entrada, llevando a los Piratas a una victoria de 4-1 y marcando su tercera victoria consecutiva después de una racha de cinco derrotas.
Olivares, quien conectó el slam ante Tyler Anderson, expresó su emoción al describir el momento como "un sueño hecho realidad". El batazo, de 424 pies, resonó en las gradas del jardín izquierdo, proporcionando un impulso decisivo para su equipo en una noche dominada por la destacada actuación de Mitch Keller y una sólida defensa.
Keller, quien permitió solo una carrera con un jonrón solitario en la quinta entrada, impresionó con un lanzamiento de cinco hits y un control magistral del juego. El manager de los Piratas, Derek Shelton, elogió la actuación del lanzador, destacando su eficiencia y habilidad para mantenerse en el juego, mientras Keller mismo reflexionó sobre la satisfacción de lograr un juego completo casi un año después de su última hazaña similar.