Tal como se reportó en la edición anterior, la Cárcel del Condado de Allegheny, ubicada en el 950 2nd Ave, Pittsburgh, PA 15219, se encontraba en la mirilla pública a consecuencia de serias alegaciones que apuntan a un patrón de maltrato institucional. Ahora, a raíz de esfuerzos multisectoriales y la presión ejercida colectivamente, el 8 de agosto de 2023, las autoridades relacionadas al complejo de corrección, dieron a conocer que el alcaide Orlando Harper estará abandonando su puesto.
En enero de este año, la coalición Alliance for Police Accountability (alianza para la responsabilidad policial, APA por sus siglas en inglés) inició una campaña con el fin de frenar los abusos y muertes de confinados en el principal centro carcelario de Pittsburgh, donde hasta la fecha se han registrado 20 muertes –desde abril de 2020– ligadas a la obstaculización de servicios médicos, cifra que representa el doble del promedio nacional.
En la actualidad, son más de 30 las organizaciones que se han incorporado a la iniciativa y el reclamo por una nueva administración, incluyendo el despido de Orlando Harper entre sus demandas. Esto, responsabilizándose por el alarmante número de decesos que han ocurrido bajo su supervisión.
“Si bien su retiro es una noticia emocionante para los residentes del condado de Allegheny, hemos estado luchando durante años para que se despida al alcaide Harper”, dijo Kyna James, organizadora de APA en un comunicado de prensa.
“Su partida debe haber ocurrido antes, hubo la necesidad de que 20 personas perdieran la vida para que esto sucediera. Harper no debería irse con una pensión y disfrutar de una jubilación cuando ha sido parte vital de la tortura y muerte ocurrida en la Cárcel del Condado de Allegheny. Y no solo él, el ejecutivo del condado Rich Fitzgerald también”, agregó James.
De acuerdo con la APA, el último proceso para la selección de un alcaide no se llevó a cabo de forma transparente, debido a que la única persona que tenía potestad en el proceso de asignar el puesto era el ejecutivo del condado, Rich Fitzgerald.
El funcionario nombró a Harper sin una consulta o aprobación del Consejo del Condado, la Junta de Supervisión Carcelaria o de las personas que habían estado trabajando regularmente con la población penal y sus familias durante años.
Por temor a que la historia vuelva a repetirse, el colectivo de organizaciones hace un llamado al ejecutivo del condado a ser parco y justo en el proceso de contratación de un nuevo alcaide. Para este piden que se incluya la opinión de personas que hayan estado previamente encarceladas, la del Consejo del Condado, la Junta de Supervisión Carcelaria y personal de servicio y apoyo a los reos.
El Thomas Merlton Center es una de las entidades que se sumó a esta lucha en favor de las personas detenidas en esta cárcel. Su directora ejecutiva también se expresó: “Todavía hay muchos peligros que enfrentan nuestros vecinos ‘adentro’ que deben ser atendidos [por las autoridades de la] cárcel del condado de Allegheny. Todavía estamos muy lejos de tener una instalación que sea segura, que respete los derechos humanos de cada individuo encarcelado y mueva el sistema hacia prácticas restaurativas y de rehabilitación…nuestro trabajo no termina aquí”.
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*Entrada principal a la Cárcel del Condado de Allegheny, ubicada en la 2nd Avenue, contigua al puente 10th Street. (CC/Tony Webster)
