PITTSBURGH, Pensilvania — El equipo de los Pittsburgh Steelers homenajeó, incorporando a su Salón de Honor, al legendario y genuinamente querido jugador, Troy Polamalu.
Casi de forma inmediata, Polamalu se expresó en una carta abierta para los Steelers y su amada “casa” de Pittsburgh.
Con el título “A Pittsburgh Steeler”, la primera oración de la carta lee:
“A la gente le cuesta trabajo creer que el primer juego de la NFL que vi, fue el primero de la NFL en el que jugué”.
Polamalu destacó que los Steelers no eran sus compañeros de equipo, sino “verdaderos hermanos”, y mencionó a varios de ellos en particular contando anécdotas.
No se olvidó del antiguo entrenador, Bill Cowher y la lección que él enseñó para poder “abrazar la miseria”, especialmente aquella del clima insoportable de los veranos e inviernos de Pittsburgh.
“Ahora, tengo la suerte de estar en el Salón de Honor, una confirmación de que vale la pena soportar las luchas por emular a los jugadores antes que yo. Gracias yinz”.
Oriundo de Hawaii y residiendo actualmente en California, Polamalu considera a Pittsburgh su hogar.
“Viví en Pittsburgh más tiempo que en cualquier otro lugar de mi vida. Pittsburgh es, sin duda, mi hogar”.